miércoles, junio 02, 2004

Algunos jinetes del apocalipsis

Referencia número uno
El marrano helicoidal que busca una nueva pocilga en la cual solazarse como pequeña meretriz, muy humilde y soltando de vez en cuando, con suma discreción, una sutil pedorrera que nos hurga los pulmones, que nos vierte en los pulmones un confort inmerecido, una alegría malsana.

Referencia número dos
Un escritor cúlpijeno, de esos que no hablan de Cristo porque temen el silicio mental. Que nos entregue una buena página, muy sencillita y con aroma, que nos haga desfallecer en el onanismo intelectual, que desaparezca de una buena vez la verruga sicoanalítica que se aloja en los adentros, en los nódulos del tracto intestinal, en las llagas de los esfínteres.

Referencia número tres
Una anciana sifilítica que imparta conferencias sobre género, sobre la diversidad, la tolerancia, etc. Y que después vuelva a su casa a chupar con fruición maníaca la verga del general teutón que no se quita el uniforme, que el uniforme es sagrado, que no me quitaré el uniforme nunca.

Referencia número cuatro
Julio Verne en motoneta por las calles de París, por los bares de París, en los antros del cartier Marrè de París(tumbando cirios, esfínteres de plástico, bebidas gaseosas)con su lengua de fuego: soy el profeta, ora pronobis ora pro nobis.